BES.- Ayer fui al médico.
UGOS.- ¿Por enfermedad?
BES.- Estuve cinco horas en la sala de espera.
UGOS.- Claro, hay mucha gente enferma.
BES.- Es muy doloroso...
UGOS.- Pero, ¿vas al médico por enfermedad o es que te has caído y te has dado un golpe?
BES.- ¿Golpe? ¿Qué golpe?
UGOS.- ¿Por enfermedad entonces?
BES.- ¿Enfermedad? Estoy como una pera. Es por falta de aire.
UGOS.- Pues la falta de aire es una enfermedad respiratoria, que yo sepa.
BES.- Falta de aire acondicionado en mi casa, que no te enteras. Las horas de más calor las paso en la sala de espera del médico, que allí se está mucho más fresco.
UGOS.- Ah… Entonces tu enfermedad es la tiesura.
BES.- ¿Tiesura?
UGOS.- La enfermedad de los tiesos.
BES.- ¿Tieso? Ande yo caliente y ríase la gente.
UGOS.- ¿Caliente? Será fresco, ¿no?
BES.- Claro, es una frase hecha.
UGOS.- Pero se presta a confusión.
BES.- Ande yo fresco, tieso y no caliente, y ríase la gente. ¿Mejor así?
UGOS.- Mejor, pero también sería mejor, digo yo, que para estar fresco te podrías ir a un centro comercial y no a la sala de espera de un médico, rodeado de enfermos a coger lo que no tienes.
BES.- Ya, pero en el médico me consuela ver que hay gente que está peor que yo.
UGOS.- Uf, tieso y enfermizamente retorcido… Peor que tú es difícil estar.
#reencuentro
